Resumen del punto principal:
notes
Resumen del punto principal:
El publicano no miraba sus méritos, sino su incapacidad de honrar a Dios por causa de su pecado, esto lo llevaba a buscar misericordia. El rico se consideraba capaz de generar deuda con su dios (sí mismo) a quien tenía en muy alta estima. El publicano fue perdonado, el rico no quiso darse cuenta que necesitaba perdón.
Lucas 18
editing
NT
Lucas 18:9-14
na28
nblh
Εἶπεν δὲ καὶ ... τὴν παραβολὴν ταύτην•
Dijo también Jesús esta parábola
[⇡] πρός τινας τοὺς πεποιθότας ἐφʼ ἑαυτοῖς ὅτι εἰσὶν δίκαιοι
a unos que confiaban en sí mismos a como justos,
[⇡] καὶ ἐξουθενοῦντας τοὺς λοιποὺς
y despreciaban a los demás b :
series
actionpurpose
Ἄνθρωποι δύο ἀνέβησαν εἰς τὸ ἱερὸν προσεύξασθαι,
“Dos hombres subieron al templo a orar a ;
ὁ εἷς Φαρισαῖος
uno era Fariseo
καὶ ὁ ἕτερος τελώνης.
y el otro recaudador de impuestos 1 .
ideaexplanation
ὁ Φαρισαῖος σταθεὶς
El Fariseo puesto en pie,
πρὸς ἑαυτὸν ταῦτα προσηύχετο•
oraba a para sí de esta manera:
actionmanner
ὁ θεός, εὐχαριστῶ σοι
‘Dios, te doy gracias
ὅτι οὐκ εἰμὶ ὥσπερ οἱ λοιποὶ τῶν ἀνθρώπων,
porque no soy como los demás hombres:
ἅρπαγες, ἄδικοι, μοιχοί,
estafadores, injustos, adúlteros;
ἢ καὶ ὡς οὗτος ὁ τελώνης•
ni aun como este recaudador de impuestos.
progression
νηστεύω δὶς τοῦ σαββάτου,
Yo ayuno a dos veces por semana;
ἀποδεκατῶ πάντα ὅσα κτῶμαι.
doy el diezmo de todo lo que gano b .’
ground
ὁ δὲ τελώνης μακρόθεν ἑστὼς
Pero el recaudador de impuestos, de pie a y a cierta distancia,
οὐκ ἤθελεν οὐδὲ τοὺς ὀφθαλμοὺς ἐπᾶραι εἰς τὸν οὐρανόν,
no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo b ,
ἀλλʼ ἔτυπτεν τὸ στῆθος αὐτοῦ
sino que se golpeaba el pecho c ,
λέγων•
diciendo:
ὁ θεός, ἱλάσθητί μοι
‘Dios, ten piedad de 1 mí,
τῷ ἁμαρτωλῷ.
[porque soy] pecador.’
temporal
negativepositive
λέγω ὑμῖν,
Les digo
κατέβη οὗτος δεδικαιωμένος εἰς τὸν οἶκον αὐτοῦ
que éste descendió a su casa justificado
παρʼ ἐκεῖνον•
pero aquél no;
ὅτι πᾶς ὁ ὑψῶν ἑαυτὸν ταπεινωθήσεται,
porque todo el que se engrandece será humillado,
ὁ δὲ ταπεινῶν ἑαυτὸν ὑψωθήσεται.
pero el que se humilla será engrandecido a .”
actionresult
na28
discourse
Notas
Es normal que nos consideremos superiores que otros y que nos consideremos buenos. Inevitablemente cuando esto sucede despreciamos a los demás. Jesús dijo esta parábola para enseñar a estas personas, pero también a nosotros. DOS HOMBRES En la parábola Jesús describe a dos hombres que llegan al templo con el propósito de orar. Uno de ellos, un fariseo, caracterizado por su estricto cumplimiento de la ley y su orgullo por considerarse muy capaz en hacerlo. Y el otro, un publicano, es decir, un recaudador de impuestos, un personaje despreciado por la sociedad judía debido a su función de recolectar los impuestos para el imperio romano. DOS ACTITUDES Las actitudes no concordaron con el aparente “nivel de espiritualidad” de cada uno. Por un lado, el fariseo, se mostraba tan confiado de su capacidad de ser fariseo devoto y cumplidor de leyes y ritos, que lo único que haces es dar gracias por no ser como “los demás hombres”, lo cual realmente significaba sin pecado. Por otro lado, el publicano se consideraba indigno delante de Dios por su propio pecado. DOS ORACIONES ¿Has prestado atención a las oraciones de estos dos personajes? El fariseo oraba para sí mismo, esto no conlleva la idea de “en secreto”, sino de delante de sí mismo (πρὸς ἑαυτὸν), consigo mismo. Y su oración es una alabanza, pero no para Dios, sino para la persona delante de la cual está orando (sí mismo). La oración del publicano era muy distinta, era una súplica, no exaltaba sus propias obras, sino que rogaba por la obra de misericordia de Aquel que podía perdonarle. DOS RESULTADOS Teniendo en cuenta los detalles anteriores, el resultado ya no es tan sorprendente. El publicano fue perdonado, la justicia de Dios fue sobre porque no valoró su propia capacidad, en cambio reconoció que en él no había ninguna capacidad y que era delante de Dios su principal problema, el pecado. Él reconoció su necesidad de perdón por su ofensa a Dios. La historia del fariseo fue muy distinta. Si bien el texto no lo indica, pero yo lo imagino tan satisfecho en sí mismo de regreso a su casa, pero no satisfecho en Dios, sino en haber continuado con su vida ritualista, con un orgullo aún más alto. Lo que sí dice la Escritura es que el no fue justificado. El pobre ególatra era tan incapaz de ofenderse a sí mismo, como era incapaz de perdonarse sus propios pecados. DOS PRINCIPIOS Todo el que se engrandece será humillado. El que se humilla será engrandecido. Los principios de Jesús son tan claros que sólo me queda una pregunta por hacer ¿Qué tan bueno te consideras?